31.1.12



Me siento muy tranquila. Debe ser por eso que me siento rara..
No se me presentan incertidumbres, tengo el alma tranquila, y eso hace que mi cuerpo este sano.
Hoy me hicieron masajes y me di cuenta lo tensa que estaba y pensaba, que todos esos nudos son tensiones acumuladas que tranquilamente las puedo desatar..
Como pueden cambiar las cosas en tan poco tiempo, como la cabeza se te acomoda y se amolda al lugar en donde estás. Te comes miles de mambos y sin querer están metido en una batidora que no deja de ser tu misma cabeza.
Qué alivio poder hablar, como las palabras pueden unir corazones  y ablandar temores. Estoy muy contenta de poder ser un buen cofre y no pienso decepcionar a nadie. Como también estoy cumpliendo mi promesa de no mentirme más ni mentirle al mundo.. Tranquilamente soy yo y así me sonríen o me hacen cara fea cuando no les gusta, y me siento parte siendo diferente.
Como en todos lados, hay gente que es una copia barata del clásico estereotipo de persona, queriendo quedar bien con todos cambiando de opinión a cada rato.
Estamos en la misma, confiamos en gente que vimos hace dos días e invitamos a todos a formar parte de la guitarreada..
Saludarnos cuarenta veces al día no es problema y si uno tiene que salir a comprar vamos todos juntos a hacerle compañía. No gastamos más de un billete negro en cada compra porque no llegamos al fin de semana, en dónde es el único día que nos podemos permitir un gusto.
Pasados de galletitas de agua y paté. Esos amados fideos, y las comidas sanas cada tanto porque nuestro cuerpo grita buscando proteínas.
Aprendemos a acomodarnos con lo que tenemos y ¡valla que hacemos ejercicio con las escaleras esas! Estos pasillos transportan hacia otra dimensión que huele a humildad.  Nos perdemos entre los carteles y a las doce de la noche se nos nubla la alegría porque viene el caminante a ponerte las cadenas.
Bueno.. convengamos que son unas cadenas de helado que se derriten cuando amanece..
Nos sentimos aparte como en un juego. Dónde la plata, las ganas, el buen humor, la predisposición y la responsabilidad reinan por sobre todas las cosas.
Ahora me despido, voy  a hundirme en las hojas de papel que fueron creadas para que personas como yo puedan llenarse de alegría y ojos nuevos.
Necesitaba, que me limpien los anteojos nomás. Y fui yo la que consiguió un papel de seda para hacerlo..